Nos diferencia como Escuela de Fútbol la importancia que le damos a los valores que se ponen de manifiesto en la práctica deportiva. Buscamos que dentro del encuadre que caracteriza a la actividad los chicos puedan formarse como personas mientras aprenden a jugar al fútbol, un deporte colectivo y dinámico que necesita de la interacción de los compañeros para que resulte entretenido jugarlo.
El aprendizaje de las distintas técnicas tanto individuales como colectivas acordes a las posibilidades motrices de cada uno pero siempre incentivando las capacidades para un correcto desarrollo, son un papel protagonista en nuestra propuesta, sabiendo que todos los chicos pueden y deben avanzar en ese sentido para poder disfrutar aún más el momento del juego.
Dos veces al año entregamos una devolución a través de un boletín deportivo personalizado donde se evalúa no solo los avances de cada niño/a en cuanto a lo específico del fútbol sino también a lo que refiere su evolución dentro de la dinámica del grupo. Se tendrán en cuenta puntos como la integración, la conducta y la participación del niño/a tanto en la clase como en el juego.